Programa 4 Sep-Dic 2023

Octubre

Guido Maria GuidaDirector Huésped

Fecha 6 octubre 8 octubre

LugarPalacio de la Música

Sinopsis

Guido Maria Guida estudió piano, composición y dirección en los conservatorios de Turín y de Milán, Italia, y se perfeccionó en la École Normale de Paris y en la prestigiada l’Accademia Chigiana de Siena. De 1981 a 1994 trabajó como asistente de Giuseppe Sinopoli en teatros de nivel internacional.

Como pianista y director Guido Maria Guida se ha presentado con las más destacadas orquestas de Europa y América, y ha entablado en relación muy especial con las sinfónicas de México y Argentina. Ha sido invitado también por las orquestas Filarmónica de la Ciudad de México, OFUNAM, Sinfónica de Xalapa y Filarmónica de Jalisco.

“Las orquestas en México son muy buenas, tienen también una muy buena actitud. Para mí es siempre un gozo del alma trabajar con orquestas mexicanas. Hay que subrayar que el nivel artístico y musical en los últimos años ha crecido mucho en México. Una cosa que me encanta de aquí es la vitalidad artística, el vivo interés para la música y el arte. Veo más vitalidad en México que ahora en Italia”: Guido Maria.

El 1 de mayo de 1786,  tres años antes de la Revolución Francesa, se estrenó en Viena una de las óperas más controvertidas de la historia musical: Le nozze di Figaro. Inspirada en una obra de teatro prohibida, Mozart concibió una ópera magistral, de una gran profundidad psicológica, de audaz crítica a la aristocracia de finales del antiguo régimen.

Es considerada como una de las óperas más importantes de la historia de la música. A pesar de las críticas recibidas por el libreto, Mozart logró grandes éxitos en sus representaciones. Resultado de la colaboración con Da Ponte, el genio de Salzburgo creó tres obras maestras del género: Las bodas de Fígaro, Don Giovanni y Così fan tutte.

Las Bodas de Fígaro es una de las óperas más destacadas del repertorio operístico estándar y aparece como la número 5 en la lista de Operabase de las óperas más representadas en todo el mundo para el período 2005-2010.

En estado de plenitud, Beethoven compuso su Sinfonía No. 4. Otro compositor alemán, Robert Schumann, se refería a esta obra como “una doncella griega entre dos gigantes nórdicos”.

“La Cuarta Sinfonía contiene un movimiento lento de indescriptible profundidad. Situada entre el drama de la Tercera y de la Quinta, esta sinfonía es un estudio sobre la serenidad: toda ella es la aceptación beethoveniana de la vida”, anotó el célebre director de orquesta austriaco Josef Krips.

El estreno de la Cuarta Sinfonía de Brahms tuvo lugar en el teatro Meiningen de Sajonia, Alemania, el 25 de octubre de 1885, bajo la batuta del mismo compositor, y el público la honró con prolongados aplausos. También fue bien acogida durante la “tournee” por las ciudades holandesas, con Bülow y Brahms alternando en la dirección de la orquesta.

Tras la interpretación de la última sinfonía de Brahms con la Filarmónica de Viena el 7 de marzo de 1897, el público advirtió la presencia del compositor en uno de los palcos: las lágrimas bañaban sus mejillas, tenía el cuerpo encorvado, la expresión cansada y sus cabellos blancos le caían en desorden sobre la frente. Entonces todos los presentes tuvieron que contener un sollozo al comprender que le estaban diciendo adiós. Brahms murió un mes más tarde, el 3 de abril de 1897.

Al parecer Brahms se inspiró en las tragedias de Sófocles para componer esta sinfonía, luego de leer las traducciones hechas por su amigo, el profesor Wendt. Los partidarios de esta hipótesis atribuyen a las ideas del poeta griego el tono sombrío y austero de la música de esta sinfonía, cuyo carácter es trágico y heroico a la vez.