Programa 2 Enero-Junio 2024
Febrero
Luis Manuel SánchezDirector Huésped
Fecha Viernes 2 Domingo 4
LugarPalacio de la Música
Obras
Con la evocación de autores de una de las regiones más fecundas de la historia de la música, el Este europeo y la Eslava, la OSY anuncia un cartel de obras convertidas en grandes clásicos tanto del nacionalista checo Smetana y del húngaro Liszt como del austriaco Schubert.
En 2019 el maestro mexicano Luis Sánchez ganó el primer lugar del Concurso de Dirección Bilbao Musiká de España. Ese mismo año fue nominado al Grammy Latino por su labor como director de la Banda Sinfónica de la Facultad de Música de la UNAM. Ha encabezado orquestas de Costa Rica, Colombia, EU, España y México. Es actual titular artístico de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes.
Del checo Bedric Smetana, la OSY recordará musicalmente al río de 430 kilómetros que baña el territorio checo, “El Moldava”, obra que forma parte de un ciclo de seis poemas sinfónicos compuestos entre 1874 y 1879 que exalta las virtudes, paisajes, historias y leyendas de su Bohemia natal.
El Moldava, el segundo poema del ciclo Mi patria, describe el flujo del río checo más conocido, desde su nacimiento en las montañas, su camino entre los bosques y su paso por una aldea donde se celebra una boda típica, sin faltar un paisaje de luna, en cuyo brillo se vislumbran las siluetas de los castillos viejos. Así, hasta desembocar en el Elba.
Inspirado en versos de Alfonse-Marie de Lamartine (1790-1869), Liszt siguió la secuencia de estados de ánimo: en el inicio, acordes y arpegios pizzicato con las cuerdas y el arpa para sugerir la llamada del poeta a su musa con la lira; luego el canto amoroso, tranquilo y pastoral, sin falar el belicoso y pesimista sobre el destino humano para luego regresr a la atmósfera inicial. El autor quiso crear un poema musical paralelo.
La Sinfonía No. 5 de Schubert está escrita para una dotación orquestal más reducida, sin clarinetes, trompetas, trombones y timbales, lo que no le resta calidad, al contrario, está señalada como una de las obras más populares del catálogo del compositor.
La Sinfonía No. 5 del autor austriaco fue estrenada el mismo año de su composición, 1816, en el Schottenhof de Viena, en concierto privado. Sin embargo, el estreno público de la obra tardó mucho, en 1873 en el Crystal Palace de Londres, o sea 45 años después de la muerte del compositor.